Y Llegó el Gran Día

Mi hijo mayor, de 23 años y su novia, mi hija pequeña, de 10 años y su amiga, mis dos sobrinas, de 14 años y su madre, que es mi hermana, mi marido y yo, (en Mayo cumplo 49) nos fuimos el Sábado 29 de Abril, a pasar el día, al SALÓN MANGA DE JEREZ DE LA FRONTERA. Yo soy de Dos Hermanas, por lo que cogimos dos coches y nos plantamos allí, dispuestos todos a pasarlo bien.

Os podeís imaginar. Edades íbamos para todos los gustos. Y yo, que iba de novata, jamás había ido “a un sitio así”. Los más jóvenes por supuesto que sí, incluso mi hija, que tiene guardada su barita de “Harry Potter” como si fuera “su tesorooooooooo”, y no sabia lo que allí me podría encontrar. Me coloqué una camiseta de juego de tronos, unos vaqueros y una gafas de sol (aunque siempre las llevo) para pasar desapercibida.

En la entrada nos encontramos a un amigo de nuestro pueblo que se iba y nos dijo, “No, yo me voy. He dejado a mi hijo. A él le da vergüenza que yo este con él”, y yo pensé “tierra trágame”. Qué coño hago yo aquí.

Pues bien amig@s. Entré y…………. A mi realmente me dió igual lo que en aquel Salón se vendía.

A mi me impactó la gente. Personas maravillosas. Gente sin prejuicios. Gente sana. Gente dispuesta a pasarlo bien, gente con la que podías hablar, (a pesar de mi edad, pues había muchísima gente joven) sin conocerte como si fuera tu amiga de toda la vida. Y los mayores regalos que me traje de ese día fueron las fotos que me hice con muchas de estas personas y los ratos de charla que compartimos.
En un stand de venta de artículos, vi a una chica con el pelo de un color azulado que me encantaba (mi hija había tenido mechitas del mismo color, de esas que se van en un par de semanas) y yo había intentado ponérselas de nuevo sin éxito y le digo “ me encanta el color de tu pelo”. Su sonrisa le iluminó toda la cara y se puso colorada y me contestó muchas gracias. Terminamos charlando como dos amigas y me explicó perfectamente que productos tenía que comprar y como hacerlo para ponerle las mechas a mi hija y que quedaran bien, porque yo, obviamente no soy peluquera. En el stand no compré nada pero la chica era súper agradable. Ojala me leyera. No sé ni su nombre.
En un escenario unas jóvenes actuaban y bailaban y los espectadores las jaleaban y bailaban. Mis sobrinas y mi hija también bailaban. Yo he de reconocer que no conocía la musica ni lo que bailaban pero me gustó.
Salimos fuera a almorzar y vi a una chica muy joven, vestida extraordinariamente bien de HARLEY QUINN, (supervillana y anti-héroe ficticia de cómics y adversaria de Batman) a la que vi en la película EL ESCUADRÓN SUICIDA y me encantó, acompañada por otras chicas también jóvenes y voy y le digo “perdona, me puedo hacer una foto contigo, porque si no me compro la muñequita de Harley Quinn de recuerdo, te llevo a mi casa (por supuesto de broma), vas genial”. La chica se rió, Me prestó el bate de béisbol y nos hicimos fotos…y yo seguí mi camino.

Y oigo por detrás, oye, oye, espera, que quiero una foto contigo. Venían corriendo tras de mi la joven Harley Quinn y dos amigas más. Sus amigas le hicieron unas fotos conmigo. Fijate, con lo vieja que soy. Solo sé de ella que es de Algeciras y es hija única o tiene hermanos. Su madre puede estar orgullosa de ella y las madres de sus amigas también. Son buenas niñas y sanas. Este recuerdo no lo olvidaré nunca. Ojala algún día mi Harley Quinn pueda leer este Artículo. Si alguien la conoce, avisadla. Solo se que es joven, estaba en el Salón Manga de Jerez, de Harley Quinn, es de Algeciras y es hija hija única o sus padres sólo tienen esta niña (podría tener hermanos).
Cuando nos sentamos a almorzar, en la parte de fuera del establecimiento vemos dentro un joven Avatar perfectamente caracterizado. Su cara Azul. Lentillas blancas, Mirada profunda. Traje. Perfecto. Estaba almorzando con un amigo. Nosotros, que eramos muchos, estábamos en dos mesas y yo, le digo a mi nuera. ¿Le pedimos un foto al Avatar? Y ella me dice “pobre está comiendo”. Y yo le digo, vamos a escribirle una nota y que se la pongan las niñas en el cristal que separaban la zona exterior del interior. Nosotras mirábamos (qué descaradas) y él se dio cuenta, y el pobre se reía (a ver, qué iba a hacer). La nota decía. “Avatar te haces una foto con nosotras cuando termines de comer por favor” y las dos niñas de 10 años se la plantaron en el cristal. El chico se comió el último bocado, sonrió y amablemente salió y soportó una por una todas las fotos de las niñas, jóvenes y viejas que eramos. Le dimos las gracias y nos despedimos. Eres grande Avatar.

Volvimos al salón, helados, gofres, regalitos, fotos, fotos, fotos, con los personajes de la guerra de las galaxias, R2 D2, con los personajes de «The walking dead”, “Los juegos del Hambre” “Harry Potter”…………PEDAZO DE AMBIENTE.